He vuelto de Mallorca enamorado de la Cala del Moro y Cala s’Almunia; estas dos pequeñas calas tienen el agua más espectacular que he visto en mi vida (mezcla el color turquesa y la transparencia casi total) que las hace ideales para bucear.

Fui a Mallorca avisado con varios mensajes tipo «tienes que ir a Caló des Moro. Vas a flipar«. Y yo, que soy muy flipable, lo apunté en la listas de calas a visitar. La apunté junto a otras pero, a toro pasado, creo que no se puede comparar con el resto. Tanto es así que en una semana hemos ido 3 veces.

La Cala del Moro y la Cala s’Almunia están a unos seis kilómetros de Santanyí. Nosotros llegamos a la zona y, aunque no debe ser habitual, aparcamos sin problemas casi en la puerta de acceso (se puede aparcar gratis junto a las casas de Sa Comuna y, sino, hay que darse un paseíto). Seguramente en los meses de verano esto sea bastante más complicado…

Debemos realizar un paseo a pie de unos 400 metros que salva el desnivel del acantilado, comenzando en la carretera y conduciéndonos hasta el nivel del mar. He visto a toda clase de turistas realizar este paseo en chancletas pero, sinceramente, prefiero hacerlo con zapatillas cerradas.

En un momento, el sendero se divide en 2: uno va a Cala Del Moro (cala de arenal rocoso) y el otro a la Cala s’Almunia (pequeño embarcadero). Tan cerca, mismo agua pero diferente suelo… ¡Cada una con su encanto!

Cala del Moro o Caló des Moro

La Cala del Moro es una cala de arena y rocas que se enclava entre altas paredes pobladas de pinos. No es de fácil acceso (hay una «escalera» de piedras) pero de verdad que merece la pena. Mide 15m de ancho y 50m de largo por lo que, si está concurrida, colocar la toalla será casi misión imposible.

Desde el mirador de la Cala del Moro tenemos 3 rutas: la ruta que baja te lleva directamente al agua color turquesa, mientras que las rutas que van para la derecha e izquierda te muestran una perspectiva más desconocida de la cala en un bonito paseo.

Para ir a la Cala del Moro y aprovecharla al 200%, es conveniente madrugar por 2 razones de peso:

1. Si llegas de los primeros, tendrás hueco en la arena y podrás bañarte antes de que llegue la gente y los barcos. Existen algunas cuevas que conviene bucear cuando estás solo…

2. Cuando va cayendo la tarde empieza a dar la sombra. Esto hace que toda la zona sea más fresca y que pierda parte de su encanto (el color del agua se oscurece).

Cala s’Almunia o s’Almonia

Cala s’Almunia es un pequeño embarcadero tallado por el mar sobre la roca, cuyas escasas porciones lisas son utilizadas por los bañistas como solariums. La entrada al agua se realiza por las rampas utilizadas para introducir las embarcaciones en el mar.

Además, yendo por la parte trasera de las casetas hay un paseo rocoso precioso en el que podemos respirar la brisa marina de primera mano y ver un arco natural desde donde algunos insensatos saltan al mar.

¿Qué os parece? ¿Habéis visto alguna vez este color de agua?